El domingo 9 de agosto, globos, banderines y mucha música, todo preparado con un inmenso cariño, adornaron nuestro Club como nunca, para que se convirtiera en escenario de una gran fiesta armada para los chicos. La nueva etapa que vive el club ha hecho de la faz social una realidad importante, por eso es que mucha gente trabajó desde hace una semana en una organización que tuvo la colaboración de los comercios de Rawson.
Es cierto que el viento jugó en contra, pero por contrapartida, la temperatura fue agradable y se pudo disimular, terminando de convertirse en una tarde nutrida de niños que llenaron el Fortín haciendo juegos y deportes guiados por los profesores e instructores de las disciplinas hockey, básquet, badminton y fútbol de la institución.
Luego vino la primera etapa de los sorteos y reparto de obsequios, para posteriormente encarar la plantación de 4 pinos delante del albergue correspondientes: uno a la Presidencia (Jorge Durán), uno al básquet (Martín Quijano), uno al hockey (Silvana de Bovero) y el cuarto al fútbol (Carlos Magariño). Cuando los jugadores de bádminton lleguen a 20, también habrá árbol de la flamante disciplina germinalista.
Más adelante los chicos, varios en compañías de sus padres, plantaron parte de los álamos que formarán una cortina alrededor del predio.
La tarde continuó con la segunda parte de los sorteos, hecha en el gimnasio para evitar el viento y el asalto al puesto de chocolate con facturas que realizaron los hambrientos pequeños deportistas germinalistas. Más de 200 chicos pasaron una tarde de domingo fenomenal en el club de sus amores. Y nuestro Germinal se vio como muy pocas veces.
Reparto de regalos en el césped del Fortín
Los payasos tuvieron una participación muy importante
Rocío también recibió su regalo
El castillo inflable fue una de las principales atracciones
Y algunos chicos se divirtieron más que otros
Algunos chicos se ponían trabas entre sí y rodaban por el piso
Otros nenes no querían despegarse del papá para no perderse entre los otros chicos
Estos galanes son los capos de los chupa-chupa
El pequeño Ferro con cara de pocos amigos
Gorda de cachetes colorados por el viento
Estos dos vagos se hacían que no sabían que les iban a sacar una foto
Torneo de penales en un arco del Fortín, ¿cómo olvidarlo?
El equipo de las mujeres le ganó al de Silvio Villagra
El 32 (ver la mano) no tuvo mejor lugar que la base del mástil para devorarse un alfajor
A estas chicas las citaron para probarse en el fútbol femenino. Estuvieron un largo rato sentadas en el banco de suplentes
Una familia completa disfrutando de la fiesta de los chicos. Muy lindo
Por nada largaría el alfajor
Algunas se hicieron un sueñito en el hombro de la mamá
Partidazo jugado en la mitad de cancha del lado del gimnasio
¡Hola bebé!
¿Le faltará mucho para estar en el banco como suplente de la 1ra?
Jano Martínez y su vástago
Mario Loyola y su jugador germinalista (Bruno) con algodón en la nariz por choque en partido
¡Mirá qué fachero este vago con los alfajores en la mano!
Familia completa con los nenes
Mariano Ferro y familia
Lalo se hace el distraído y se mezcla con los pibes a ver si recibe un regalo
Había pibes para hacer varios equipos con hinchada y todo
El niño Carlitos Magariño a punto de ser pasado por arriba por la horda albiverde
Martín Quijano plantando el pino del básquetbol delante del albergue
Silvana de Bovero, planta su pino en representación del hockey
Jorge Durán dijo: "casi me corto", y era porque había agarrado la pala del lado de la hoja. Después la quiso arreglar diciendo que había hecho una broma, pero nadie le creyó
Pobre "Maga", qué lío para enderezarlo después que se agachó
Estos piolas se sacaron la foto en el pino del básquetbol pero cuando ya lo había plantado Martín Quijano
¡Mirá cómo se ríe el bebé!
Cada niño y cada árbol representan una nueva esperanza para nuestro querido Germinal
Fue un espectáculo digno de verse. Nuestro futuro
A Fernando Valdebenito lo llevaron mal los forestadores de Germinal
La zanja de riego ya estaba hecha y la mano de obra totalmente dispuesta
La interna del chocolate. "Acá, el que sabe, soy yo", sostuvo Mariano. "No le hagás caso, yo tengo la receta", saltó el Lalo. "Fijate quién es el que lo está haciendo", argumentó Emiliano. "Qué chantas que son, cualquiera sabe que el que lo hizo fuí yo", terminó Carlitos
Quien lo hizo es lo de menos. El asunto es que los chicos lo disfrutaron. De los de la interna aparecen Emiliano y Carlitos, y a los costados se ve una parte de Mariano y Lalo. Completa la escena Martín, sirviendo.
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